Y hoy sólo somos dos individuos sentados, escuchando nuestro eco inacabable por pasillo infinito, nos miramos fijamente, con afán de placer mutuo, tus miradas son puñales que mi persona no soporta, ya que yo soy de vicio fácil.
retumba, mi persona caída a suelo abrasador no más por querer oír lo que ocurre bajo mi ser, escucho gritos, apasionados cual momento tu recordarás con buena experiencia, suspiro recordando tus palabras tabú, que para mi eran flechas directas hacia mi pecho devil a falta de amor verdadero que intentaba aferrarse a algo, hoy recuerdo esos días en los que daba un mundo por ti, bajaba la luna e intentaba que sacarás la sonrisa mas aguda posible, no importará momento y de más, claro que todo cuento se acaba, yo no fui tu príncipe, sencillamente la rana equivocada, y a día de hoy mi cabeza intenta imaginar como habraia sido todo, y me culpo de errores que hoy son ceniza de una llama fatua, extensa y sin vida.
domingo, 10 de abril de 2016
Mi profundidad
Suscribirse a:
Entradas (Atom)